Y el Premio Nobel de Química es para… los padres de las baterías de litio
¿Qué tienen en común un teléfono móvil, un parque eólico y el nuevo Honda CR-V híbrido? Existen muchas posibilidades. A primera vista podríamos decir, por ejemplo, que los tres representan tecnologías modernas que están transformando las maneras en las que vivimos y trabajamos. Pero si miramos a las entrañas de estos tres inventos clave de nuestros tiempos encontraremos un elemento común e inseparable de todos ellos: las baterías de litio.
No es de extrañar, pues, que la Real Academia de las Ciencias de Suecia haya concedido el Premio Nobel de Química de 2019 al estadounidense John B. Goodenough, al británico Stanley Whittingham y al japonés Akira Yoshino, los padres de esta tecnología.
Un mundo “recargable”
Las baterías de litio, resultado de las investigaciones de los tres científicos mencionados, han transformado el comportamiento de la humanidad a muchos niveles: comunicación, negocios, entretenimiento, transportes… Como se dijo en el discurso de entrega del premio, Goodenough, Whittingham y Yoshino han hecho extraordinarias contribuciones al «mundo recargable» en el que hoy vivimos.